~ Swami Sivananda
El Ser, o Atman, no está fuera de ti, sino que es tu propio Ser interno.
El
Atman que reside en tu corazón es más pequeño que lo pequeño y más grande que
lo grande.
Es el Alma de la hormiga y la del elefante. Es el Alma del universo. Es la Súper alma. Es el Alma del pecador y del santo a la vez. Es el Alma del alma. Es el Alma Suprema. Es el Purusha Supremo (el aspecto masculino de la Divinidad). Es Chaitaña, o la Consciencia.
Es el Alma de la hormiga y la del elefante. Es el Alma del universo. Es la Súper alma. Es el Alma del pecador y del santo a la vez. Es el Alma del alma. Es el Alma Suprema. Es el Purusha Supremo (el aspecto masculino de la Divinidad). Es Chaitaña, o la Consciencia.
El conocedor y lo conocido son una
misma cosa. Yo y Dios somos uno en el conocimiento. El Jiva y Brahman son, en
esencia, una misma cosa. El alma del gato y la de la rata son la misma. La
esencia del sol y la luna es la misma.
Existe una esencia homogénea común a
todas las formas. Esa esencia es lo Absoluto o lo Inmortal. Esa esencia es el
Atman, Brahman o lo Infinito. Brahman no tiene forma.
La Consciencia no tiene forma. La Dicha no tiene forma. La Paz no tiene forma.
La Consciencia no tiene forma. La Dicha no tiene forma. La Paz no tiene forma.
Naturaleza
de la consciencia pura
La
consciencia pura es un conocimiento puro, en el que no hay ni pensamiento ni
percepción. No hay «dentro» ni «fuera». Es la esencia homogénea de la
sabiduría-dicha. La consciencia de Juan y la de Pedro no pueden ser diferentes,
sino que son una misma.
La
diferencia existe únicamente en los objetos que se manifiestan en el espacio.
En el conocimiento puro no hay espacio ni tiempo. La consciencia pura es
infinita, inmutable, está más allá de la causa y el efecto, más allá del bien y
del mal. Carece de deseos, por lo que es perfecta, pura y libre. La consciencia
pura existe eternamente.
La consciencia pura no es lo mismo que las consciencias física o mental. Es una consciencia absoluta de la que dependen ambas consciencias física y mental. No existe el pensamiento en la consciencia pura.
Difícilmente puede concebírsela. No existe el juego de los sentidos en ella. Ni se ve ni se oye. Solo existe la sabiduría. Es lo Infinito (Bhuma), en lo que no hay nadie que vea ni nadie que escuche. Sólo queda la Cosa en sí misma. Es el auto conocimiento puro, más allá del alcance de los sentidos, la mente y el intelecto.
El sentimiento de ego se desvanece por completo. Sólo la consciencia bráhmica, o divina, brilla por si misma en toda su gloria.
La doctrina Neti-Neti
Brahman no puede ser descrito. Sólo puede describírsele por medio de la expresión «Neti, Neti», que significa «No soy esto ni aquello». Lo que no es esto ni aquello es lo Eterno, o Brahman.
Puedes suprimir o negar todos los nombres y todas las formas por medio de la doctrina «Neti, Neti», pero no puedes eliminar lo Absoluto, o Brahman, que es el substrato de todo. Lo que queda tras la negación de todo, es lo Eterno, o Brahman.
Yo, tú, él, esto, aquí, allí, ahora, entonces..., ninguna de estas cosas tiene verdadero significado.