Libertad y esclavitud son para la mente
Esencialmente somos la consciencia que es siempre libre, pacifica y dichosa.
Sin embargo una mente impura nos limita y causa identificación con el cuerpo, apego y sufrimiento.
Al contrario una mente pura se identifica con la consciencia y refleja claramente la paz y la dicha eterna y infinita.
Pero, aunque somos consciencia lo que vivimos y experimentamos depende de la mente.
La mente impura, o sea una mente llena de rajas y tamas, deseos, orgullo, codicia, ira, odio, celos, avaricia etc., nos esclaviza, nos aleja de nuestra naturaleza divina y nos obliga a vivir como entidades cuerpo-mentales y experimentar placer y sufrimiento.
La mente pura sáttvica, o sea una mente libre del tamas y rajas, libre de deseos, orgullo, ira etc., está desapegada de toda experiencia sensorial y del cuerpo y reside naturalmente en su fuente, -la consciencia y se sumerge en ella.
Así, aunque vivimos en el cuerpo vivimos libres de las dualidades y del sufrimiento y disfrutamos sin ningún esfuerzo la paz y la dicha que realmente somos.