Páginas

COACHING - COURSES

Páginas

Páginas

domingo, 29 de enero de 2017

EGO Y DESEO ~ Atman Nityananda

 
EGO Y DESEO

El deseo y el ego (el ego rajasotamásico* inferior que nos identifica con el cuerpo) no son dos cosas distintas, sino una energía que asume varia formas de expresión.

El ego mismo asume la forma del deseo. Y en realidad no tenemos muchos deseos. Solo hay desear. El ego es desear. Por eso se crean constatemente nuevos deseos por asociación con nuevos objetos. Cada vez que el ego (que su naturaleza es el deseo) por imaginación proyecta su lujuria en algo y se identifica con esto se crea un nuevo deseo.

¿Porqué el ego se identifica con unos objetos y con otros no?El deseo es ilógico, irracional y por eso puede identificarse con cualquier cosa aparece en su vista y cree o imagina que le dará placer. Por eso a unos les gustan la mujeres con pelo rubia, morena algunos las mujeres delgadas, a otros las altas etc.. Todo eso es completamente irazional. Es solo un questión de falta de discernimiento, imaginación, identificación y proyección.

Y todas las ramas del ego (las tendencias egoístas), también son solo modificaciones o transformaciones del deseo. La ira, el miedo, el gusto,,el disgusto, los celos, la envidia, la codicia, la lujuria, la avaricia, el orgullo, el odio etc. son solo formas del deseo. El deseo se transforma en estas formas según las circunstancias.

Entonces cuando nos  identificamos con cualquier expresión egoísta, es decir: la sensación soy el cuerpo, cualquier deseo, la ira, el orgullo, el gusto , el disgusto etc. incrementamos el ego (su cambo energético aumenta)  y al contrario cuando nos desidentificamos de las expresiones egoistas, sea la que sea y la eliminamos por cualquier medio, ( oración, mantra etc.) disminuimos el ego.

No es posible eliminar el ego como si fuera una cosa simple. Tenemos que eliminar la rama egoísta que se manifiesta en cada momento, sea la que sea.

 Solo cuando el ego después de muchos años de práctica y purificación las ramas egoistas se vuelven muy débiles y podemos sin esforzarnos hacer meditación profunda o auto-indagación profunda, no hace falta trabajar con las distintas ramas egoístas. Cuando las ramas egoístas ya están muy débiles y nuestra capacidad de permanecer autoconscientes y arraigados en nuestro Ser es alta, ya podemos detener la manifestación del ego antes de asumir alguna de sus formas. Es decir detenemos el ego antes de expresarse en cualquier forma. En realidad no permitimos que el ego asuma alguna forma de expresión. Solo si no estamos bastante vigilados el ego puede robar la atención y expresase en cualquier de sus formas. Pero aun así tenemos los recursos desidntificarnos desde el ego, pacificarlo y regresar a nuestro Ser.

Pero esto es solo para aspirantes muy avanzados. La mayoría se identifica fácilmente con las tendencias egoístas y toma consciencia de ellas cuando ya han manifestado totalmente.

Según nuestro  progreso en la eliminación del ego y la capacidad de estar vigilantes y arraigados en nuestro Ser verdadero  devenimos más y más capaces detener ego cada vez más pronto. Así no nos identificamos con ello, no nos perdemos en ello, no lo incrementamos y no vivimos las consecuencias que nos provocaría su manifestación.

NOTA:
el ego rajasotamásico* inferior: Según los Gunas (Sattva-rajas-tamas) predominantes podemos también clasificar el ego como ego sáttvico y ego tamasorajásico.

Hay tres tipos de Ego (Ahamkara), a saber: el egoísmo sáttvico, el egoísmo rajásico y el egoísmo tamásico. El egoísmo sáttvico no nos ata en el Samsara; le ayudará al aspirante para alcanzar la emancipación final. Si uno intenta afirmar 'Aham Brahma Asmi' ('Yo soy el Brahman') ― esto es egoísmo sáttvico. Incluso en un Jivanmukta (Liberado) existe un ligero rastro de egoísmo sáttvico. El Jivanmukta realiza acciones a través de este egoísmo sáttvico.
— Swami Sivananda 
 
El ego en su aspecto sáttvico está involucrado en la Sadhana positivamente, mientras que el ego en su aspecto tamasorajasico quiere impedirnos de hacer Sadhana y crea muchos obstáculos con el fin de hacernos abandonar la práctica y el sendero espiritual. Y esto porque, siguiendo una vida espiritual, el ego pierde sus placeres que hasta ahora los tenia cuando le apetecía, y porque sabe que con la Sadhana al fin acabará de existir. Al principio no podemos evitar la resistencia que el ego opone contra nuestra voluntad de marchar en el camino espiritual y tampoco podemos evitar todas las ilusiones que crea, porque estamos fuertemente identificados con el ego y nuestro Buddhi está hipnotizado y manipulado por las energías y las tendencias egoístas y por los Gunas Tamas y Rajas.

Este egoísmo Rajásico y Tamásico cubre la naturaleza Sattvica, más elevada y divina, velando el alma auto luminosa e inmortal. 
— Swami Sivananda
 



viernes, 27 de enero de 2017

Vivir con paz, amor, dicha y armonía es un cuestión de vibración ~ Atman Nityananda


Vivir con paz, amor, dicha y armonía es cuestión de vibración

Solo una mente sáttvica, libre de deseos y pasiones puede ser luminosa, serena, contenta, armónica, pacífica y feliz. Y esto, porque el Sattva aunque es materia, es la cualidad de la naturaleza más cercana al Espíritu o Consciencia. Es el único guna que puede reflejar la Consciencia claramente. Al contrario, el rajas y el tamas como vibraciones son más alejadas de la Consciencia y distorsionan y cubren la luz de la consciencia.

Entonces, si en nuestra mente siguen los gunas tamas y rajas no podemos evitar el sufrimiento causado por las emociones y los pensamientos tamasorajásicos.

Los gunas por su naturaleza cambian constantemente en nuestra mente; Así por un tiempo predomina en la mente uno de los tres y luego otro. Con qué frecuencia y por cuánto tiempo se manifestará cada guna en la mente depende de la constitución gúnica de nuestra mente y de las circunstancias. Si por ejemplo hay más rajas guna en la mente, entonces el rajas se manifestará con mayorfrecuencia y su manifestación durará más tiempo que los otros dos gunas y así sucesivamente.

Durante los momentos que se manifiesta el Sattva estamos pacíficos, concentrados en el aquí y ahora, creativos, contentos, felices, etc.

Cuando el rajas está predominando hay hiperactividad, pasión, descontento, placer, distracción, impaciencia, manipulación, competividad, agresividad y orgullo, y cuando el tamas prevalece hay pereza, torpeza, letargo, falta de comprensión, depresión, estupidez, desánimo, odio, violencia etc.

En cada persona se manifiestan más las características psicológicas del guna que está más presente en su mente.

En las personas que prevalece el tamas su comportamiento, sus acciones y su estado mental y emocional son tamásicos en la mayor parte de su vida. Habrá momentos rajásicos también, pero momentos sáttvicos serán muy pocos o casi ausentes (depende del porcentaje del rajas y del sattva en su mente). Igual, en las personas que prevalece el rajas guna sus acciones y su estado mental y emocional son rajásicos en la mayor parte de su vida y en ellos que prevalece en su mente el sattva guna sus acciones y su estado mental y emocional son sáttvicos en la mayor parte de su vida.

La espiritualidad es un proceso científico que tiene como objetivo principal transformar la mente en sattva y como objetivo final la realización del Ser mediante meditación incesante que es posible solo para una mente sáttvica.

NOTA:
Podéis leer en el ensayo de David Frawley los rasgos psicológicos de acuerdo de los tre gunas

En este blog hay más ensayos sobre los gunas. Hay también dos capítulos enteros del Bhagavad Gita (Cap. 14, 17, 18) donde se habla sobre los gunas y unas referencias (de los capítulos 3, 7, 13 ) con respeto a los gunas.

jueves, 26 de enero de 2017

La asociación apropiada es la piedra angular de la transformación espiritual y realización ~ Atman Nityananda


LA ASOCIACIÓN APROPIADA ES LA PIEDRA ANGULAR DE LA TRANSFORMACIÓN ESPIRITUAL Y REALIZACIÓN

Sattva es la clave de la transformación espiritual.

El factor más importante de la auto-transformación, el despertar y la autorrealización es la asociación. Mientras uno se asocia con personas, lugares e impresiones tamásicas y rajásicas, no hay posibilidad de ningún progreso real.
Si queremos calentar nuestras manos debemos ponerlas cerca de algo que está caliente. De manera similar, si queremos que nuestra mente se vuelva luminosa, armoniosa y despierta, debemos estar en la compañía de gente de tal mente. En presencia de una mente luminosa nuestra mente absorbe las vibraciones luminosas y sáttvicas y gradualmente se transforma.

Los que tienen mentes luminosas y puras sattvicas, son los sabios, los santos y los grandes seres espirituales como Buda, Jesús Cristo, Krishna, Amma, Swami Sivananda, Anandamayi, Ramana Maharshi, Paramahansa Yogananda, Haidakhan Babaji, etc.

Afortunados son aquellos que tienen la oportunidad de vivir y practicar durante mucho tiempo a los pies de un gran ser espiritual o en unos lugares sagrados como Hairakhan Vishva Mahadham (el ashram de Babaji), en Arunachala (donde está el ashram de Sri Ramana Maharshi), en el ashram de Sivananda en Rishikesh etc.

Busca la compañía de gente de mente pura sáttvica· permanece y practica lo más posible en lugares sáttvicos (lugares sagrados, naturaleza, templos, ashrams, monasterios)· alimenta tu mente con impresiones sáttvicas, emociones sátvicas y pensamientos sáttvicos (leer textos y libros sagrados, escuchar y leer las palabras de seres auto-realizados, santos y sabios, etc.)· alimenta al cuerpo con comida sáttvica e involucrate principalmente en acciones sáttvicas.

La asociación con sattva (pureza, luz, armonía) y la práctica diaria diligente y sincera es la única manera de realizar la conciencia de Dios en esta misma vida.

¡Que Dios os bendiga a realizar la Verdad!

Om Tat Sat

miércoles, 25 de enero de 2017

El Ser, la mente y la liberación ~ Swami Sivananda



El Ser, la mente y la liberación

El Ser (Atman  o Consciencia)

Tú no puedes dudar o negar tu propia existencia. Tú siempre sientes que existes. Ésta existencia es el Atman o tu propio Ser. El conocedor de la duda o de la negación siempre existe. Este Conocedor es tu propio Atman.

Tú eres, en realidad, este Atman eterno (Consciencia) que todo lo impregna. Tú eres la misma consciencia pura.

*Este Atman es Sat-Chid-Ananda (Existencia Absoluta, Consciencia Absoluta y Dicha Absoluta).*
Existe en el pasado, el presente y el futuro; por eso es "Sat". 
Es Consciencia Pura o Absoluta sin pensamientos; por eso es "Chit".
Es Dicha Absoluta; por eso es Ananda.

Brahman o Atman (Consciencia) está más allá del alcance de la mente y de la palabra. Más allá de la lógica, la razón, la mente, la ciencia. Sólo puede realizarse mediante la meditación.

La mente

La mente es un mero pordiosero que obtiene prestadas su luz y su inteligencia del gobernador interno, del Atman autoefulgente, igual que la barra de hierro se apropia del calor y el resplandor del fuego. 

La mente es la causa tanto de la esclavitud como de la salvación del hombre.

Dos aspectos de la mente

La mente tiene dos aspectos: uno es el discriminativo, y el otro el imaginativo. La mente, en su aspecto discriminativo, se libera de la esclavitud y alcanza la emancipación, (Moksha). En su aspecto imaginativo, se esclaviza a si misma a este mundo.

La esclavitud

Existe esclavitud cuando la mente se apega a cualquier objeto u órgano sensorial. 
Existe esclavitud cuando la mente desea o anhela algo, cuando acepta o rechaza algo, cuando se siente feliz o triste por algo. 

La liberación

Existe liberación cuando la mente no se apega a ningún objeto u órgano sensorial. Existe liberación cuando la mente no desea, ni rechaza, ni acepta, ni se siente feliz ni triste. 

Practica para liberarse de la mente egoísta

La emancipación consiste en la liberación de la esclavitud del ego y sus deseos, del ego y sus propensiones y anhelos por lo sensorial.

El estudiante que camina por la senda de la Verdad debe desarrollar los cuatro medios para la salvación, o Sádhana Chatushtaia, que son: Viveka, o discriminación; Vairagya, o desapasionamiento; Shat-Sampat, o las seis virtudes, y Mumukshutva, o deseo de liberación. Solamente entonces puede uno proseguir sin temor por el camino. Ni un ápice de progreso espiritual es posible, a menos que uno esté realmente provisto de esta cuádruple cualificación. Estos cuatro medios son tanantiguos como los Vedas o como el mismo mundo.

Cualquiera sea tu trabajo, la Sadhana (practicar sistematicamente cada dia) debe continuar del mismo modo en que te ocupas de tu comida y de la comodidad corporal.

Hay tres etapas principales en el camino de Jñana: (1) la etapa de la Sadhana; (2) los vislumbres,(Alpam) (3) Sahajavastha o estado nativo en el que uno está firmemente establecido en la consciencia de Brahman o su propio Sat-Chit-Ananda Svarupa. 

No detengas la Sadhana cuando obtengas las vislumbres (Alpam). Continúa hasta que te encuentres establecido en Sahajavastha  (establecer en la Consciencia).

lunes, 23 de enero de 2017

No son los pensamientos sino el ego que cumbre nuestra esencia ~ Atman Nityananda



No son los pensamientos sino el ego el que cubre nuestra esencia

No son los pensamientos que cubren (aparentemente) la consciencia sino el ego* -que es lo que se identifica con los pensamientos, emociones, imaginaciones etc..

El ego (en su aspecto rajasotamásico) es la causa original que nos impide discernir y realizar que somos la consciencia (el espacio luminoso y silencioso interior) y no una entidad cuerpo-mental que se identifica como cuerpo-yo llamado tal y tal, (Jorge, Maria etc.).

Aunque es mucho más fácil tomar consciencia del espacio silencioso interior* cuando la mente está tranquila, sosegada y enfocada (especialmente por los que no tienen una mente pura sáttvica y no han practicado bastante meditación y auto indagación) los pensamientos no son la causa fundamental que nos impide tomar conciencia de nuestra esencia.

Las percepciones, los pensamientos, las sensaciones y las emociones no cubren nuestro Ser (la consciencia, el espacio silencioso y luminoso interior). Es debido al ego que nos identificamos con todo eso, y así fallamos en percibir o tomar consciencia de nuestra naturaleza esencial. Lo cual significa que podemos percibir pensamientos, emociones y sensaciones que occuren por sí mismos, y percibir objetos sensoriales y a la vez ser conscientes de nuestra naturaleza verdadera (con la condición de que ya conocemos qué es ser consciente de sí mismo).

Sin embargo en este caso no es posible percibir y disfrutar plenamente la paz, la dicha y la plentitud de nuestra esencia ya que una parte de atención está prestada a las percepciones (pensamientos, sensaciones etc.) y además experimentamos las vibraciones que irradian estas percepciones. Solo en meditación profunda o samadhi podemos vivir con toda claridad la paz, la dicha y la plenitud del Ser.

El ego o yo, es una energía misteriosa que pone un velo sobre nuestra inteligencia (buddhi) y así fallamos en discernir que somos la consciencia y no una entidad cuerpo-mental.

Además el ego por sus innumerables identificaciones con los pensamientos, las sensaciones, las emociones y las percepciones sensoriales nos hace caer en un estado de olvido en lo cual nos estamos soñando aunque somos en el estado de vigilia. En este estado de sueño en vigilia la atención está casi totalmente apegada al contexto mental, emocional o perceptivo y ni siquiera percibimos que somos vivos, que existimos y aún menos darnos cuenta del espacio silencioso interior que es el fondo de toda experiencia (interior o exterior) sea la que sea.


NOTAS:

el ego* : el ego rajasotamñasico que causa la idnetificación con el cuepro, los pensamientos, las emociones y las percpciones sensoriales no es un pensamiento sino un tipo de energía vital

espacio silencioso interior*: El espacio interior, luminoso y siencioso es nuestro Ser verdadero.

viernes, 20 de enero de 2017

Todo pasa solo ahora ~ Atman Nityananda

 
Todo pasa solo ahora

Los pensamientos, las emociones, las sensaciones, las percepciones suceden solo ahora.

No importa si pensamos en el pasado o en el futuro, los pensamientos occuren aquí y ahora.

El ahora no pertenece en el tiempo. El ´ahora´ es la sin tiempo consciencia (Atman) que es el sustrato y la última fuente de todas apariencias (Pensamientos, emociones, sensaciones, percepciones).

El tema es que nuestra mente por extroversión, sus pasiones, sus hábitos y su programación se identifica con las apariencias que son sus propias creaciones y no se identifica con el sustrato de las apariencias, la consciencia, que es paz, luz, amor, libertad y dicha absolutas.

Por eso en vez de experimentar plenitud, paz y dicha, experimentamos placer y dolor según las tendencias de la mente y las circumstancias externas.

miércoles, 18 de enero de 2017

LA PRÁCTICA DE LA MEDITACIÓN PARTE II / SENDA DIVINA ~ Swami Sivananda

HAIDAKHAN BABAJI

LA PRÁCTICA DE LA MEDITACIÓN 
PARTE II 

 ~ Swami Sivananda

 Algunas indicaciones útiles

No fuerces los ojos en la meditación. No fuerces la mente. No luches ni te pelees con la mente. Ésa es una seria equivocación. Muchos neófitos cometen este error grave. Y ésa es la razón por la que pronto se cansan. No hagas ningún esfuerzo violento por controlar la mente. Déjale, más bien, un poco de libertad durante un rato, permitiéndola que corra, se canse y se agote. La mente saltará al principio como un mono sin domesticar. Pero se calmará gradualmente hasta que puedas fijarla en tu Lakshia, (punto de concentración). No alejes voluntaria y violentamente los pensamientos intrusos. Permite que fluyan suavemente los pensamientos divinos. Los pensamientos viciosos se desvanecerán de ese modo por sí mismos.

Cuando empiezas a barrer una habitación que ha permanecido cerrada durante seis meses, salen de sus rincones todo tipo de porquerías. Igualmente durante la meditación, bajo la presión del Yoga y por la gracia de Dios, surgen a la superficie de la mente diversos tipos de impurezas. Elimínalos valientemente uno por uno por medio de métodos adecuados y de la práctica de sus virtudes contrarias. Cuando meditas y cuando desarrollas virtudes divinas o sáttuicas, se construye en la mente un camino espiritual. Si no eres regular en tu meditación, si mengua su desapasionamiento, y si te vuelves descuidado y no vigilas, este camino espiritual será barrido por la inundación de pensamientos impuros y de Vásanas negativos. Por tanto, sé regular en tu meditación. La regularidad en la meditación es de capital importancia.

Razones para el fracaso en la meditación

Siempre se oye una protesta entre los aspirantes: “He meditado durante los últimos doce años y no he hecho ningún progreso. No tengo ninguna Realización.” ¿Por qué es así? ¿Cuál es la razón de ello? Que no se han sumergido en la meditación profunda en lo más hondo de sus corazones. No han saturado adecuadamente su mente con pensamientos en Dios. No han llevado a cabo un Sádhana regular y sistemático. No han disciplinado los Indriyas perfectamente. No han recolectado los rayos de la mente que tienden hacia el exterior. No han hecho la autodeterminación: «Voy a realizarme en este mismo segundo.» No han entregado a Dios el cien por cien o el todo de su mente. Si quien medita tiene pensamientos divinos durante diez minutos y luego pensamientos mundanos y conflictivos durante los diez minutos siguientes, no tendrá éxito en alcanzar la conciencia divina. Debes correr tras un solo conejo con vigor, fortaleza y firmeza. Así podrás estar seguro de cogerlo. Debes albergar sólo pensamientos divinos durante todo el tiempo. EntOnces podrás estar seguro de
realizar pronto a Dios.

No debes precipitarte demasiado en anhelar los frutos en seguida ruando empieces a meditar. Una mujer joven dio ciento ocho vueltas al árbol Asvattha para tener descendencia e inmediatamente tocó su abdomen para ver si tenia ya o no el hijo en él. Eso es sencillamente una tontería, pues tendrá que esperar durante meses. Así mismo, si meditas por algún tiempo regularmente, tu mente madurará y alcanzarás eventualmente Atma-sakshatkara, o la realización del Ser. La prisa es enemiga de la perfección.

Experiencias en la meditación

Varias personas distintas tienen varias experiencias espirituales distintas en la meditación. No puede haber una experiencia común para todos. Depende del temperamento, del tipo de Sádhana, del lugar de concentración, y de varios otros factores. Algunos oyen sonidos melódicos en sus oídos. Otros ven luces. Algunos obtienen Ananda, o dicha espiritual. Otros obtienen ambas Prákasa y Ananda. Durante la meditación puedes experimentar que te estás elevando sobre el suelo. Algunos experimentan que incluso vuelan por los aires. Si tienes experiencias de destellos del Ser durante la meditación intensa, si contemplas una luz brillante durante la meditación, y si tienes visiones espirituales de ángeles, arcángeles, Rishis, Munis, Dévatas, o cualquier otra experiencia espiritual extraordinaria, no te eches atrás con terror. No los confundas con fantasmas. No interrumpas el Sádhana. Continúa. Persevera diligentemente. Rompe un velo tras otro.

Los aspirantes están ansiosos de tener experiencias espirituales en seguida. Pero en cuanto las experimentan, sienten miedo. Se alarman terriblemente cuando se alzan por encima de la consciencia física y se preguntan con temor si regresarán o no. ¿Por qué han de sentir ningún miedo? No importa mucho si van a regresar o no a la consciencia física. Todos nuestros intentos están dirigidos principalmente a salir de esta consciencia física. Estamos acostumbrados a ciertas limitaciones, y cuando éstas desaparecen repentinamente, sentimos como si no tuviésemos base alguna sobre la que apoyamos. Ésa es la razón por la que tememos cuando nos alzamos por encima de la consciencia física. Es una experiencia nueva para la que se necesita coraje. La valentía es un requisito indispensable.

A veces, te molestarán espíritus malignos. Puede que tengan rostros feos y fieros con largos dientes. Ahuyéntalos con tu voluntad fuerte. Ordénales: «Marchaos», y se irán. Son vampiros. Son elementales. No hacen ningún daño a los Sádhakas. Pero ahí se probará tu coraje. Si eres tímido, no podrás seguir adelante. Obtén fuerza y coraje, del Atman dentro de ti, que es la fuente inexhaustible. También te cruzarás con espíritus buenos que te ayudarán mucho según progreses. Durante la meditación, algunas de las visiones que veas son tus propios pensamientos materializados, mientras que algunas otras serán visiones reales y objetivas.

Si tu salud general es buena, si eres alegre, feliz y fuerte física y mentalmente, si tu mente es serena y firme, si obtienes Ananda en la meditación, y si tu voluntad se vuelve más fuerte, pura e irresistible, piensa que estás mejorando en la meditación y que todo va bien.

La meditación y el trabajo

Quien medita no es capaz de trabajar. Quien trabaja no es capaz de meditar. Eso no es equilibrio. Eso no es ecuanimidad. Los dos principios de la meditación y del trabajo deben estar equilibrados. Debes ser capaz, si estás dispuesto a seguir el mandato divino, de aceptar cualquier tarea que se te ofrezca, incluso un trabajo estupendo, y abandonarlo al día siguiente con la misma quietud con que lo tomaste, sin sentir que la responsabilidad es tuya. Debes ser capaz de trabajar duramente en el mundo con gran esfuerzo, y una vez la tarea esté concluida, deberás ser capaz de encerrarte en una cueva en reclusión absoluta durante mucho tiempo con una gran paz de mente. Eso es equilibrio. Ésa es la verdadera fortaleza.

Qué ocurre durante la meditación

Durante la meditación se forman nuevos surcos en el cerebro y la mente asciende por nuevos derroteros espirituales. Cuando la mente se vuelve firme en la meditación, los glóbulos oculares quedan fijos también. Un yogui cuya mente está calmada tiene una mirada firme y no parpadea. Sus ojos son limpios, de color rojo o blanco puro. Cuando penetras en una meditación muy profunda y silenciosa, la respiración deja de producirse en las fosas nasales, aunque puede producirse algún movimiento lento y ocasional en los pulmones y en el abdomen. En la meditación profunda y continuada, el pensamiento cesa por completo, quedando sólo la idea única de (Aham Brahma-asmi» (Yo soy Brahman). Cuando también esta idea desaparece, se produce el Nirvikalpa Samadhi o la Sahaja-Advaita-nishta. Así como la sal se disuelve en el agua, la mente sáttvica se funde entonces en el silencio de Brahman, su substrato.

Beneficios de la meditación

La meditación actúa como un tónico poderoso. La energía divina fluye libremente de los pies del Señor a los distintos organismos de los Sádhakas. Las vibraciones sagradas penetran en todas las células del cuerpo y curan todas las enfermedades de éste. Quienes meditan se ahorran las facturas de los médicos. La meditación ayuda mucho a eliminar diversas emociones e impulsos. Si puedes controlar tus emociones y humores, no cometerás acciones tontas ni equivocadas. Si das cuerda al reloj por la noche, funciona sin parar durante veinticuatro horas seguidas. De igual modo, si meditas durante una o dos horas en el Brahma Muhurta (Período de una hora y media antes del amanecer), serás capaz de trabajar sosegadamente durante el día. Nada podrá perturbar tu mente. Todo tu organismo estará cargado con las vibraciones espirituales o las ondas divinas.

La meditación regular abre las avenidas del conocimiento intuitivo, vuelve a la mente calmada y firme, despierta un sentimiento estático y pone al estudiante yógico en contacto con la fuente del Supremo Purusha. Si hay dudas, estas se esclarecen por si mismas al avanzar firmemente por el sendero del Dhyana Yoga (Yoga de meditación). La meditación desarrolla pensamientos fuertes y puros. Las imágenes mentales son entonces claras y bien definidas. Los pensamientos buenos están bien arraigados. Al esclarecerse las ideas, se desvanece la confusión. Descubrirás por ti mismo el modo de afianzarte sobre el siguiente escalón de la escalera espiritual. Una voz interna y misteriosa te guiará. Escúchala atentamente. El fuego de la meditación aniquila toda impureza debida al vicio. Entonces llega pronto el conocimiento o la sabiduría divina, que conduce directamente a la emancipación final (Mukti). Medita. Medita. No pierdas un solo segundo. La meditación eliminará todas las aflicciones de la vida. Éste es el único camino.

domingo, 15 de enero de 2017

LA PRÁCTICA DE LA MEDITACIÓN PARTE I / SENDA DIVINA ~ Swami Sivananda


LA PRÁCTICA DE LA MEDITACIÓN
PARTE I
~ Swami Sivananda

Llevar una vida virtuosa no es en si suficiente para alcanzar la realización de Dios.
La concentración de la mente es absolutamente necesaria. Una vida buena y virtuosa sólo prepara la mente como un instrumento adecuado para la concentración y la meditación. Son éstas las que conducen eventualmente a la realización del Ser.
Sin la ayuda de la meditación no puedes lograr el conocimiento del Ser, sin cuya ayuda no puedes alzarte hasta el estado divino. Y sin este, a su vez, no puedes librarte de las trabas de la mente y alcanzar la inmortalidad.
La meditación es el único camino real hacia el logro de la salvación (Moksha). Es una escalera misteriosa que conduce de la tierra al cielo, del dolor a la dicha, de la inquietud a la paz perenne, de la ignorancia al conocimiento, y de la mortalidad a la inmortalidad.

¿Qué es la meditación?

La meditación es mantener un fluido constante de la consciencia hacia Dios. Todos los pensamientos se expulsan de la mente, la cual se llena y satura de pensamientos divinos, de la gloria divina y de la presencia divina. La meditación es la séptima etapa o escalón en la escalera del Yoga. Los Yogis la llaman Dhyana. Los Jnanis la denominan Nididdhyásana. Los Bhaktas la nombran Bhávana.

Olvida el cuerpo. Olvida tu entorno. Olvidar es el Sádhana más elevado. Ayuda mucho en la meditación y facilita la aproximación a Dios. Acordándote de Dios, puedes olvidar todas las demás cosas. 
Jesús dice: «Vacíate y yo te llenaré.» Esto corresponde a la enseñanza de Patanyali Maharshi: «El Yoga consiste en la aniquilación de todas las funciones mentales.»
Este proceso de vaciar o dejar la mente en blanco es, sin duda, una disciplina de entrenamiento, aunque no cabe duda de que una práctica continuada, de cualquier tipo que sea, conduce al éxito. En una gran ciudad hay mucho ruido y bullicio a las ocho de la tarde. A las nueve ya no hay tanto. A las diez de la noche se reduce aún más, ya las once mucho más aún. A la una de la madrugada hay paz en todas partes. De igual modo, al principio de las prácticas yógicas hay continuos Vrittis (pensamientos) en la mente. Gradualmente, las olas del pensamiento se amainan, hasta que, al final, todas las manifestaciones mentales se controlan. El Yogi disfruta entonces de una paz perfecta.

Cómo practicar la meditación

Siéntate en un lugar solitario en Padma, Siddha o Sukha Asana (posturas para meditar). Libérate de todas las pasiones, emociones e impulsos. Subyuga los sentidos. Abstrae la mente de los objetos. La mente estará entonces calmada, fija en un punto, pura y sutil. Con ayuda de este instrumento entrenado que es la mente disciplinada, contempla al Ser Infinito. No pienses en ninguna otra cosa. No dejes que penetre en tu mente ningún pensamiento mundano. No dejes pensar a la mente en ningún goce físico o mental. Cuando abrigue estos pensamientos, dale un buen martillazo. Entonces tenderá hacia Dios. Así como el Ganga fluye continuamente hacia el mar, los pensamientos en Dios deben fluir continuamente hacia el Señor. Igual que el aceite fluye al ser venido de una jarra a otra, formando un chorro ininterrumpido y continuo, e igual que el sonido armónico del doblar de las campanas llega hasta el oído en una corriente continua, así también debe fluir la mente hacia Dios como una corriente ininterrumpida.

Has de tener una imagen mental de Dios o de Brahman, ya sea concreta o abstracta, antes de comenzar a meditar. Si eres un neófito en la meditación, empieza por repetir algunos versos sagrados (Slokas o Stotras) e himnos sublimes durante diez minutos tan pronto como te sientes a meditar. Eso elevará la mente, que podrá abstraerse entonces fácilmente de los objetos mundanos. Interrumpe luego también este tipo de pensamiento y fija la mente sólo en una idea por medio de grandes y repetidos esfuerzos. Entonces se producirá Nishta, (la mente se establecerá en la meditación).
Cuando enciendes un fuego, reúnes algo de paja, pedazos de papel y trozos finos de madera. Pero el fuego se extingue rápidamente y tienes que soplar le varias veces con el fuelle. Poco después, se convierte en un gran fuego que difícilmente puedes apagar. Del mismo modo, al principio de la meditación, los neófitos se distraen y vuelven a sus viejos derroteros. Tendrán que elevar su mente una y otra vez, fijándola en el punto de concentración (Lakshia). Cuando ésta se vuelve firme y profunda, se establecen eventualmente en Dios. La meditación se vuelve entonces natural, (Sahaja).

Ayudas en la meditación

Para meditar necesitas tener un intelecto calmado, claro, puro, sutil, agudo, firme y fijo en un punto. Brahman es puro y sutil, por lo que necesitas una mente pura y sutil para aproximarte a Él.

Si prendes fuego a un madero verde, no puede quemarse; mientras que si pones al fuego un trozo de madera seca, en seguida prenderá y se quemará. De igual modo, quienes no han purificado su mente no serán capaces de encender el fuego de la meditación. Cuando se sienten a meditar se dedicarán a dormir y a soñar, o a construir castillos en el aire. Pero quienes han eliminado las impurezas de su mente por medio del Japa (la repetición del nombre de Dios o de un mantra), el servicio, la caridad, el Pranayama etc., penetrarán en la meditación profunda en cuanto se sienten a meditar. La mente pura y madura prenderá en seguida con el fuego de la meditación.

Practica la meditación en el Brahma Muhurta (Período de una hora y media antes del amanecer). Éste es el mejor momento para meditar. Tendrás una mente clara y calmada en las horas tempranas de la mañana. La mente es en ese momento como una hoja blanca de papel o como una tarjeta en blanco, y estará relativamente libre de Samskaras, (impresiones). La mente puede ser moldeada como quieras fácilmente con pensamientos divinos. Hay entonces una influencia espiritual y un silencio misterioso. Todos los santos y Yogis practican la meditación a esa hora y envían sus vibraciones espirituales al mundo entero. Te beneficiarán sus vibraciones si comienzas tu oración. Japa y meditación a esa hora. Necesitas esforzarte, pues el estado meditativo de la mente llega por sí solo.

Practica la meditación regular y sistemáticamente a la misma hora todos los días. Tendrás entonces fácilmente el espíritu meditativo. Un lugar solitario con condiciones y vibraciones espirituales, un lugar fresco y  sáttuico con un clima templado, como Uttarkashi. Rishikesh, Lakshmanyhula, Kankhal, Badrinaraian, es un requisito indispensable para la concentración de la mente y la meditación. Las orillas del Ganga o el Nármada (Ríos de India), el paisaje de los Himalayas, los jardines floreados y agradables, los templos sagrados, éstos son los lugares que elevan la mente en la concentración y la meditación. Acude a ellos.

Sólo puedes meditar cuando la mente está por encima de toda ansiedad. Se debe suspender toda actividad física, y todo apego debe ser aniquilado por completo y sin piedad durante cinco o seis años si deseas practicar el Dhyana Yoga (Yoga de meditación) y si quieres realizar a Dios por medio de la concentración de la mente. El leer periódicos y mantener correspondencia con amigos y parientes ha de interrumpirse por completo. pues distraen la mente y fortalecen la idea del mundo. La reclusión por un periodo de cinco a seis años es indispensable.
 Se continúa en el segunda parte